LA MOCION DE CENSURA CONTRA HORMAECHA SERA RECHAZADA POR NO CONTAR CON LOS VOTOS DEL PP
- Hormaechea acusa a los populares de "chantajistas" y "fascistas"
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La moción de censura presentada por el PSOE de Cantabria contra el Gobierno de Juan Hormaechea, que hoy se debate en el Parlamento cántabro, será rechazada al no contar los socialistas con el apoyo de los trece diputados del PP, por lo que no contará con los 20 votos suficientes para que prospere.
El ebate, caracterizado por la moderación de todos los intervinientes, comenzó a las 10.30 de la mañana con la presentación de la moción de censura por parte del portavoz de los socialista, Miguel Angel Palacio.
Palacio acusó al PP de abandonar al Gobierno regional, pero no querer echarle y a Aznar de no querer saber nada de los problemas de Cantabria, "que su propio partido ha generado". Según Palacio, los diputados del PP no tienen "coraje" para quitar de la presidencia de Cantabria a Juan Hormaechea. El candidato alternativo del PSOE en la moción de censura, el secretario regional y senador por Cantabria, Jaime Blanco, dirigió su discurso a los diputados populares, a quienes acusó de no tener "la valentía suficiente para romper con el pasado".
Tras desglosar su programa de Gobierno, basado en la "estabilidad democrática, suficiencia financiera y honradez", Blanco pidió a los populares que dejen de utilizar "justificaciones artificiosas para ocultar actuaciones vergonzantes".
El candidato lternativo aseguró que no votar la moción de censura suponía "mantener la vergüenza" en la región y pidió a los populares que no confundan "personales intereses con los intereses de nuestra región".
Por su parte, el presidente cántabro, Juan Hormaechea, comenzó su replica acusando al PP de ser el gestor de la crisis al no reconocer "la pluralidad política", en clara referencia a su partido la Unión para el Progreso de Cantabria (UPCA).
En sus críticas al candidato socialista, Hormaechea le acusó e no tener un programa serio, "porque en este caso yo estaría dispuesto a votarle, pero sólo ha prometido gasto y despilfarro".
Después de calificar de "inútil" al Gobierno de gestión presidido por Blanco tras la moción de censura que ya se le planteó a Juan Hormaechea en noviembre de 1990, el presdiente cántabro arremetió contra el Gobierno de Felipe González, al que acusó de realizar "ingeniería financiera", y se preguntó "cómo los socialistas vienen a solucionar el declive de Cantabria cuando no puden solucionar el de España".
Iniciado el debate entre los distintos grupos de la Cámara, el primero en intervenir fue el portavoz del grupo mixto y consejero de Cultura, Dionisio García Cortazar, que calificó la moción de censura como la segunda parte de la expuesta en 1990, "pero su estética es peor".
"Sólo se trabaja para acabar con la figura política de Juan Hormaechea", dijo Cortazar, para agregar que "el punto final de la moción es el procesamiento. Se trata de condenar antes de juzgar".
El consejero de Cultura hizo también referencias al Gobierno de gestión presidido por Blanco, al que calificó de "catastrófico y de gesto" y aseguró que este Gobierno "creó desconfianza en la región". Además, abogó por un Ejecutivo regional de centro derecha y afirmó que la ruptura no es "irreversible".
A continuación tomó la palabra el portavoz del Partido Regionalista de Cantabria (PRC), Miguel Angel Revilla, que afirmó que los motivos que llevaron a la anterior moción de censura estaban vigentes,por lo que apoyaba la iniciativa, al tiempo que se mostró crítico con el candidato socialista. "El voto es a la destitución de Juan Hormaechea, no al candidato alternativo", dijo Revilla.
El debate más intenso de toda la sesión se produjo en la intervención del portavoz del grupo popular, José Antonio Arce Bezanilla, quien al comienzo de su intervención calificó de "claro oportunismo" la moción socialista, para concluir acusando al presidente cántabro de gobernar con "subjetivismo y capricho, donde lo conceptos de amistad/enemistad y el estado anímico de Juan Horamechea determinan a quién hay que pagar o no pagar desde la Diputación".
Tras indicar que ahora lo único que preocupa a Hormaechea es su procesamiento, lo que le aleja de gobernar, Arce acusó al presidente cántabro de "falsedad y permanente manipulación" hacia los ciudadanos.
El portavoz popular calificó de "inaceptable" la manera de gobernar de Hormaechea, por lo que, a su juicio, no puede seguir gobernando democráticamente. Aunque a situación política propicie una moción de censura, la fidelidad al electorado nos sitúa en la responsabilidad de no votar al candidato socialista".
El presidente cántabro tomó la palabra para acusar a los populares de "diez años de intriga en la Diputación regional", al tiempo que los calificó de "chantajistas", "fascistas" o "especuladores de la función pública". Además, aseguró que el PP mantiene "secuestrados en el grupo a varios diputados que accedieron a la Cámara con el voto de UPCA".
"Usedes no gobiernan en Cantabria y cuando lo han hecho lo han realizado con mis votos", sentenció Hormaechea, para agregar que "se han dedicado a las intrigas de los que no saben ganar las votaciones. Ustedes no tienen valor para mover sus votos y no están legitimados para hablar de centro derecha".
(SERVIMEDIA)
01 Jul 1993
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