De las 354 huelgas que acabaron en acuerdo, 233 terminaron en un pacto en el que no predominó ninguna de las partes, 23 con la aceptación total de las peticiones de los trabajadores, 96 con predominio de las reivindicaciones de los empleados y 2 con el mantenimiento total o predominante de la postura de la empresa.

Porcontra, en 353 casos la huelga terminó sin que se resolviera el conflicto planteado y en 12 casos la empresa llegó a la adopción del cierre empresarial.

El informe del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales detalla también la motivación de las huelgas convocadas el año pasado. Un 35% obedecieron a conflictos derivados del proceso de negociación colectiva, un 59% a otras razones y un 6% a razones no estrictamente laborales.

La participación en huelgas fue notablemente mayor en el sector público ue en el privado: 195 trabajadores participantes y 212 jornadas no trabajadas por cada mil empleados públicos frente a 97 y 182, respectivamente, en el privado.