El convenio desarrollará durante 1997 el programa de eliminación de barreras en el transporte público urbano en las líneas regulares de autobús, tanto urbanas como suburbanas.

Los sucesivos convenios que se han firmado hasta ahora entre la Administración cenral y la Federación Española de Municipios y Provincias han hecho posible que ahora existan 746 autobuses de piso bajo, que junto a los 225 nuevos vehículos que posibilita el nuevo acuerdo suman 971 unidades adaptadas.

El Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, a través del Imserso, aporta para el desarrollo del proyecto un total de 450 millones de pesetas, presupuesto con el que financiará el 75 por ciento del coste diferencial entre el precio del autobús de piso bajo y el vehículo convencional de imilares características, con un tope máximo de dos millones por unidad.

El objetivo del convenio es continuar con la integración de las soluciones accesibles para las personas con problemas de movilidad al transporte regular, para conseguir de esta manera que el transporte público sea integrador.

Los autobuses adaptados o con plataforma se destinan no sólo a las personas discapacitadas, sino también a aquellas que se incluyen bajo el término de personas con movilidad reducida y que alcanzan aproimadamente el 25% de la población. Entre ellas están los mayores de 65 años, las personas obesas, las embarazadas en los últimos meses de de gestación y los lesionados transitorios.