En declaraciones a Servimedia, el secretario general de AME, José María Pairet, aseguró que el problema "no estaba en el CNI sino en su director" recientemente dimitido, una persona "no cualificada y que fue nombrada por motivos partidistas".

"El Gobierno quiere echar la culpa a todo el mundo cuando el único responsable era su jefe, que fallaba más que una escopeta de feria", dijo Pairet.

A su entender, la estrategia del Gobierno pasa por transmitir la idea de que es necesaria una reformar interna del CNI más allá de la destitución de Saiz. "Como lo designaron ellos, tratan de salvar la cara y repartir culpas", dijo.

Por último, Pairet indicó que la prueba de que en el seno del CNI no hacen falta reformas está en que "a pesar de la incompetencia del director", la institución "ha seguido funcionando".