La acción fue convocada por la federación de las asociaciones de vecinos de la ciudad, la organización SOS Racismo y los sindiatos UGT y CCOO, con el objetivo de protestar contra la Ley de Extranjería y las trabas con que se encuentran los inmigrantes para poder permanecer en España.

Entre los participantes de la concentración, que contó con el apoyo de partidos como el PSC, Iniciativa per Catalunya (IC) y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), se encontraban el presidente de IC, Rafael Ribó, y los líderes sindicales de UGT y CCOO en Cataluña, José María Alvarez y Joan Coscubiela, respectivamente.

El manifiesto unitaro que hicieron público los organizadores de la protesta reclamó la regularización de la situación legal de las personas que trabajan y viven en España sin tener los papeles en regla y la erradicación de la práctica de expulsiones, además del rechazo a los ataques de carácter nazi contra los extranjeros.