Navarro afirmó que losembarazos no deseados entre adolescentes son consecuencia de la falta de campañas de educación sexual para jóvenes como las que se realizaron durante los gobiernos socialistas y que "han desaparecido desde que el PP está en el poder".

La dirigente socialista sugirió al Gobierno que "no le asuste hacer campañas de educación sexual" porque no implican "una mayor intensidad de la actividad sexual" de los jóvenes y recordó que desde hace meses el Grupo Socialista pidió que se impulsen los centros de planiicación familiar, a los que se les ha reducido el presupuesto en los últimos dos años.

Según Micaela Navarro, "parece que el Gobierno olvida que la maternidad prematura sigue siendo un obstáculo para el proceso educativo, económico y social de las jóvenes".

Finalmente, Navarro criticó la postura de la Conferencia Episcopal por pedir ayer al Gobierno que no legalice la píldora abortiva RU-486, "cuando es algo que ha aprobado por unanimidad el Congreso de los Diputados", y señaló que "intromisionesde este tipo son intolerables porque pretenden ir en contra de las decisiones de la Cámara de representantes".