La tercera y última prórroga automática que permite el reglamento del Congreso de los Diputados se aprobó el martes pasado y concluye el próximo martes a las ocho de la tarde.

Sin embargo, algunos grupos han pedido poder aprovechar hasta final de mes y apurar así el plazo posible, ya que enero no es hábil en el Parlamento.

Las negociaciones se están sucediendo estos días a varias bandas, con reuniones continuas entre representantes del Gobierno y del PSOE con los partidos que respaldaron la reforma en Cataluña.

Todos los grupos parlamentarios excepto el PP han firmado un escrito dirigido a la Mesa del Congreso pidiendo la ampliación hasta el día 30 de diciembre.

En caso de que hubiera unanimidad de los grupos para esa ampliación, el presidente, Manuel Marín, podría firmar la prórroga sin necesidad de reunir formalmente a la Mesa. Por eso, el hecho de que la reunión haya sido ya convocada indica que el PP se opone a sumarse a esa mayoría.

Sin embargo, las interpretaciones del reglamento son contradictorias. Hay quien dice que, una vez concluidas las tres prórrogas automáticas sería necesaria la unanimidad para aprobar otra, aunque sea mínima, y hay quien dice que bastaría con una mayoría.

En todo caso, el plazo no se podrá ampliar más allá del 30 de diciembre porque enero no es un mes hábil en el Parlamento, por lo que no hay posibilidad de registrar enmiendas.

En cambio, si todas las enmiendas estuvieran presentadas, la ponencia encargada de analizarlas sí podría trabajar durante ese mes, porque se consideran reuniones internas de trabajo, no formales.