La denuncia fue interpuesta por el sindicato CNT en nombre de Marta F.C. que ya no trabaja para la cadena de supermercados. La antigua trabajadora comenzó su relación laboral con la empresa en el año 2000, en la tienda de Bollullos Par del Condado (Huelva).

En el año 2002, José Luis Araixa es nombrado nuevo jefe de tienda y, según una nota de CNT, cambia el trato hacia los trabajadores, y en especial hacia la trabajadora denunciante, llegando incluso a insultarla y a desacreditar su trabajo.

La hostilidad aumenta tras apoyar Marta a otra compañera que discrepaba de su jefe, lo que desemboca en una baja por un cuadro ansioso depresivo que acaba motivando su despido improcedente.

El acoso continuó tras el despido y, tal y como reconoce la sentecia, provoca un intento de suicidio de la denunciante. Desde entonces esta trabajadora denuncia la política laboral de Mercadona. La empresa ya había sido condenada hace un año por acoso en su centro de Peñarroya (Córdoba).