Sin embargo, se da la paradoja de que el número de benefiiarios ha disminuido un 5%, puesto que se ha pasado de 1.382.496 parados con prestación en los cuatro primeros meses del año pasado a los 1.313.742 de 1997.

Esta aparente contradicción se explica por la reducción de la tasa de paro, que ha posibilitado la mejora de la tasa de cobertura aunque menos personas se beneficien de percepciones económicas por desempleo.

Los beneficiarios del nivel contributivo, es decir, que cobraron paro por haber cotizado lo suficiente a la Seguridad Social, fueron 569035 parados, un 8% menos que en enero-abril de 1996.

Los del nivel asistencial, que recibieron subsidio por razones sociales, fueron 558.091 personas, con un descenso del 5,5%. Por desempleo parcial sólo recibieron prestaciones 220 trabajadores, lo que supone una disminución del 6%.

Los eventuales agrarios subsidiados fueron el único colectivo que aumentó en términos porcentuales, puesto que los 186.396 beneficiarios del primer trimestre significaron una subida del 7,2%.