El departamento que dirige Jaume Matas mantiene que este proyecto de la Confederación Hidrográfica del Tajo no tiene ningún impacto sobre el medio ambiente y sus efectos serán positivos, porque además de sanear los terrenos afectados por aguas estancadas en el área periurbana de Burujón, mantendrán la función de desagüe natural propia de los arroyos.

La capacidad de desagüe de estos arroyos ha sido menguada por deechos procedentes de vertidos y por la invasión de cañas y zarzas, lo que ha dado lugar a inundaciones en régimen torrencial sobre infraestructuras y propiedades y a malos olores originados por los estanciamienos de aguas residuales del casco urbano del pueblo cuando los caudales se reducen.

Estas obras, demandadas por las autoridades locales y propietarios de las fincas colindantes, consistirán en el acondicionamiento de los cauces y saneamientos de taludes en una longitud de 1.000 metros, tanto en e arroyo Torrijos como en el de Escalonilla y en 400 metros en el arroyo Alcubillete. Su presupuesto es de 5 millones de pesetas.