De cara a la declaración de guerra en los territorios palestinos, recalcó que, de acuerdo con los Convenios de Ginebra, las potencias ocupantes tienen el deber de garantizar que las necesidades médicas de la población civil en el territorio ocupado sean satisfechas.

Por ello, pidió al Gobierno de Israel que respete la llegada de trabajadores y de material humanitario a las zonas donde la población civil ha sufrido ataques.

La colaboración de Israel resulta "indispensable para permitir la entrada de suministros médicos esenciales, el paso de equipos sanitarios y de personal humanitario y la salida de pacientes que necesitan atención fuera de la Franja de Gaza", explicó.

Ante el anuncio de Israel de que dejará sin electricidad, sin comida y sin combustible la Franja de Gaza, Médicos del Mundo demandó que se asegure todo tipo de suministros básicos al conjunto de la población palestina en Gaza, con pleno respeto del derecho internacional humanitario.

Por otro lado, la organización exigió la liberación de la población civil secuestrada por miembros de Hamás y el cese de las hostilidades contra la población israelí.