EL MEDICO ALEMAN DETENIDO EN MALLORCA SE CONFIESA AUTOR DE LA MUERTE DE SUS DOS HIJOS

- El presunto parricida dice no arrepentirse de su acción porque tenía "razones"

PALMA DE MALLORCA
SERVIMEDIA

Ruedeger Peter Oyntzen, el médico alemán detenido esta mañna en Mallorca, se ha declarado autor de la muerte de sus dos hijos de corta edad, cuyos cadáveres fueron descubiertos ayer en un apartamento de un complejo turístico de Sa Coma, al norte de la isla, según informaron fuentes cercanas a la investigación.

En sus primeras declaraciones ante la policía, el presunto parricida no dio muestras de arrepentimiento y dijo tener sus "razones" para matar a sus hijos, según las mismas fuentes.

Oyntzen fue detenido a las 6,30 horas de la pasada madrugada en unmirador situado en las cercanías de Formentor, al norte de Mallorca, por la policía local del municipio de Pollensa, que había acudido a la zona por un conato de incendio.

Tras pedir al sospechoso que se identificase, el facultativo alemán fue detenido sin oponer ninguna resistencia y se confesó autor de la muerte de sus dos hijos, Katharina y Matthias Oyntzen.

Los cuerpos sin vida de los pequeños, de 8 y 6 años de edad, fueron hallados en la mañana del viernes en el apartamento donde pasaban lasvacaciones con su padre. Los pequeños aparecieron tumbados en la cama con una flor en las manos.

Oyntzen explicó a los efectivos policiales que les había suministrado un tranquilizante letal por vía oral, aunque a la pequeña Katharina le aumentó posteriormente la dosis por vía intravenosa.

Tras comparecer ante la policía, el presunto parricida fue puesto a disposición judicial y a las 13,30 horas de hoy continuaba prestado declaración ante el titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Manacor Previsiblemente, en las próximas horas ingresará en la prisión de Palma de Mallorca.

Por su parte, los médicos forenses del Tanatorio de Manacor comenzaron esta mañana a practicar la autopsia a los cadáveres de los dos pequeños.

El médico alemán presenta un hematoma en la pierna como resultado de un intento de suicidio, según explicó él mismo a la policía. En el momento de su detención vestía pantalones bermudas azules y una camiseta blanca.

Estaba tranquilo, según fuentes policiales, e incuso se disculpó por las molestias que había causado. Llevaba varios días sin comer y se había dirigido a Formentor en autobús, de acuerdo con su relato.

En las cartas que el presunto parricida dejó en el apartamento donde fueron hallados los cadáveres de sus hijos, Oyntzen justificaba su acción y expresaba su intención de suicidarse por haber perdido la custodia de los niños en favor de su ex esposa, de la que se separó recientemente.

(SERVIMEDIA)
07 Sep 1996
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