En un comunicado de prensa, el Consejo de las Cámaras señaló que, para mantener este comportamiento a medio plazo, será necesario que "se aborden las reformas estructurales que requiere nuestra economía para mejorar la competitividad".

Las Cámaras prevén que el año que viene el PIB español crecerá un 3,5 por ciento y que se generarán 400.000 nuevos empleos. No obstante, espera también que se produzca una caida de la demanda interna, debido a que se pasará el efecto expansivo provcado tanto por la reforma del nuevo IRPF como por el acusado descenso de los tipos de interés.