El suceso ocurrió alrededor de la 1 de la madrugada en una vivienda de la calle Campotéjar, número 29, en el distrito de Usera. Los agentes que acudieron al lugar alertados por una llamada al 091 encontraron a Antonio tendido en el salón del domicilio familiar en un charco de sangre.

En la vivienda se encontraban los padres y dos hijos cuando llegó la policía. El hijo detenido,que tenía manchas de sangre, repitió en varias ocasiones a los agentes que había sido él quien mató de una puñalada a su hermano durante una acalorada discusión por los citados pantalones.

No obstante, antes de ser trasladado a la Sección de Homicidios de la policía fue asistido de lesiones leves en un centro médico. La víctima presentaba, además de la herida mortal, otras lesiones por arma blanca, según el primer examen policial. El juez ordenó el levantamiento del cadáver y su traslado al Instituto natómico Forense.

El padre de los jóvenes, que está separado de su mujer, declaró a Onda Madrid que está seguro de que Antonio no tenía intención de matar a su hermano, sino que la agresión fue producto de la tensión suscitada en la discusión. A pesar de tener 6 años menos, Antonio era bastante más corpulento que su hermano, con quien, según algunos vecinos, nunca se llevó bien.