Este estudio, que presentó hoy la subsecretaria del Ministerio de Sanidad y Política Social, Consuelo Sánchez Naranjo, también recoge que el 53,7% de los seropositivos no tiene empleo.

Los prejuicios y la discriminación percibida son las principales barreras de las personas con VIH para incorporarse al trabajo y para el desarrollo de una actividad laboral normalizada, asegura el citado informe, que también denuncia que la información existente sobre el VIH y el sida en el contexto laboral es claramente insuficiente.

Por todo esto propone que hay que reducir los miedos relacionados con la transmisión casual del virus y las creencias erróneas sobre la falta de productividad de las personas seropositivas y contribuir a la promoción de políticas de cooperación entre las administraciones públicas, los empleadores, los trabajadores, los sindicatos y las ONG para la creación de un entorno seguro de respeto y confianza que facilite el pleno desarrollo laboral de las personas con VIH.