Una parte del dispositivo, un total de 2.000 agentes, se encargará de la custodia directa de los colegios electorales, en coordinación con los miembros de las policías locales, mientras que el resto realizará labores complementarias de apoyo en las que tomarán parte todas las unidades de la Ertzaintza.

La operación culminará el próximo domingo, el día de la votación, con un despliegue especial que se prolongará durante toda la jornada, hasta que finalicen las votaciones y el escrutinio, en el que participarán más de 5.000 agentes de la Ertzaintza.

Los ertzainas destinados a la protección de los colegios electorales se encargarán de impedir cualquier género de propaganda política en el recinto y en sus inmediaciones y evitar que se ejerza cualquier tipo de coacción o presión sobre los electores.

Los agentes dedicados a la custodia de los colegios electorales facilitarán el acceso de las personas enfermas o impedidas. Además, acompañarán y facilitarán el desplazamiento a los integrantes de las mesas que lo requieran.