Los organizadores de la marcha, que ranscurrió sin incidentes, criticaron la falta de colaboración del Ayuntamiento de Madrid, que no cortó el tráfico en las calles del recorrido, como suele hacerse en el día oficial de la bici, y agradecieron por el contrario la colaboración prestada por Cruz Roja.

Según Aedenat, la decisión de Ayuntamiento de no cortar al tráfico las calles por las que pasaba la marcha hizo que medio millar de ciclistas, en su mayoría familias, abandonaran por el riesgo de accidentes.

Las personas que participaro en la marcha defendían el uso de la bicicleta como medio de transporte ideal para desplazarse a diario por la ciudad, sobre todo si se tiene en cuenta que en Madrid, según Aedenat, el 40 por ciento de los desplazamientos en coche son de menos de tres kilómetros.

Aedenat y Pedalibre consideran que la mejora de la calidad de las condiciones viales para la bici haría aumentar el número de usuarios de este medio de transporte "silencioso, saludable, muy fácil de aparcar (ocupa un 8 por ciento del espacioque necesita un coche) y rápido (la velocidad de una bicleta en las áreas urbanas se sitúa entre los 15 y 25 kilómetros por hora)".

Para los ecologistas y los ciclistas, la bici es una alternativa real de transporte en la ciudad, que paliaría el "enorme" impacto ambiental que el uso del vehículo privado motorizado tiene sobre los ciudadanos y su entorno, sin contar los efectos positivos que tendría sobre el ahorro energético y la salud.

Por ello, los defensores de la bici insisten en que es necesrio crear en la sociedad actitudes positivas ante los ciclistas, sobre todo en los demás usuarios de la carretera, y aumentar la seguridad.

Para conseguir esto último, Aedenat y Pedalibre piden reducir la velocidad máxima del coche en la ciudad, dar una opción a las bicis en las vías rápidas, estudiar todos los cruces peligrosos para las bicis y adecuar un carril para que las bicis puedan circular en los puentes y túneles.

Aedenat y Pedalibre destacaron también la necesidad de mejorar las combinaiones de la bici con los transportes públicos, posibilitando el transporte de las bicicletas en los trenes de cercanías y creando en las urbanizaciones y barrios periféricos las infraestructuras necesarias para que los ciclistas puedan acceder fácilmente al transporte público disponible.