Según confirmaron fuentes de la dirección del parque, el ganado, que permanece en las fincas "Las marismillas" y "Las nuevas", podría estar dañando los ecosistemas.

Ante esta situación, las mismas fentes consideran que los ganaderos mantienen una situación inflexible, ya que, aseguran, durante los últimos meses no han respondido a las ofertas de diálogo formuladas por el Instituto Nacional para la Conservación de la Naturaleza (Icona), encargado de la gestión de este espacio protegido.

El 2 de enero de 1993 un grupo de ganaderos introdujo alrededor de 150 cabezas de ganado en la finca "Las marismillas", a pesar de no contar con autorización para ello.

Los propietarios del ganado mantuvieronun enfrentamiento con los responsables del parque, durante el cual fue agredida la bióloga Blanca Ramos, según denunció el director conservador de Doñana, Jesús Casas.

Los ganaderos justificaron su actitud argumentando que en el exterior del parque no existían pastos suficientes para alimentar a los animales, como consecuencia de los efectos de la sequía.