Los inmigrantes, tras dirigirse a la sede de la Delegación de Gobierno en Ceuta para entrevistarse con Cerdeira y no conseguirlo, regresaron a las Murallas del Angulo, lugar en el que se hallan agrupados, donde decidieron tomar medidas de presión para protestar por su situación que les impide salir de esta ciudad.

Así, sobre las 13.00 de esta tarde, unos 150 inmigrantes comenzaron a quemar neumáticos y a arremeter con piedras contra los oches que transitaban por esa zona.

La agresión fue respondida, en principio, por jóvenes estudiantes y pesonal civil, así como por algunos agentes de la Policía Local que se encontraban en esa zona céntrica de Ceuta. Posteriormente, se sumaron a repeler la contienda otros efectivos de las fuerzas de seguridad del Estado.

Los disturbios se recrudecieron, aún más, cuando el policía nacional Antonio Arrebola Alcantara fue alcanzado en el pecho por un disparo procedente de lugar que ocupaban los inmgrantes.

El funcionario de policía fue intervenido quirúrgicamente, por espacio de más de 3 horas, en el Hospital Militar de Ceuta, que ha informado que se le ha encontrado una bala en el pulmón.

Igualmente, y para atender a los heridos en la reyerta, personal civil, efectivos policiales y manifestantes, se ordenó que la segunda planta de un centro sanitario ceutí fuera desalojada.

Alrededor de las 15.00 de esta tarde y tras la intervención conjunta de la Guardia Civil, Policía Nacional y Loal, la revuelta quedó controlada, tras dejar a más de 12 personas heridas de diversas consideración y un número, aún indeterminado, de inmigrantes detenidos.