Según recordó hoy la citada ONG, la legislación actual permite que las mujeres que están cumpliendo condena y tengan hijos pequeños puedan vivir con ellos en sus celdas y cuidarlos hasta que cumplan tres años.

En los campamentos organizados por Fundación Padre Garralda - Horizontes Abiertos, los niños y sus madres tienen acceso a un espacio donde pueden convivir y en el que los pequeños tienen la posibilidad de jugar, hacer amigos y disfrutar de una actividad típica de verano para cualquier otro niño de su edad.

La Fundación Padre Garralda-Horizontes Abiertos desarrolla varios proyectos con estos niños que viven en las cárceles, así como con sus madres, siempre en estrecha colaboración con la Dirección General de Instituciones Penitenciarias

"Nuestro objetivo es conseguir que los pequeños que viven en las cárceles con sus madres tengan las mismas oportunidades y limitaciones que cualquier otro pequeño", apunta la ONG.