El ERE, que la compañía ha hecho efectivo hoy mismo, establece el despido de 234 trabajadores, que cobrarán una indemnización de 36 días de salario por año de servicio a la empresa, con un máximo de 20 mensualidades.

Las indemnizaciones se pagarán con cargo a los fondos que resulten del concurso de acreedores declarado por la empresa que dirige Fernando Martín el pasado 15 de julio.

El hecho de que la empresa se encuentre inmersa en el concurso de acreedores es lo que hace necesario el visto bueno judicial al ERE, dado hoy por el citado juzgado de La Coruña.