MARRUECOS. ATIME PIDE "CONFIANZA Y RESPETO MUTUO" A LOS DOS PAISES PARA "CURAR HERIDAS" QUE AFECTAN ESPECIALMENTE A LOS INMIGRANTES

MADRID
SERVIMEDIA

La Asociación de Trabajadores Inmigrantes Marroquíes en España (Atime) ha expresado su satisfacción por el acuerdo alcanzado sobre la Isla del Perejil, pero ha pedido a los gobiernos de ambos países "confianza y respeto mutuo" para resolver unas relaciones deterioradas de la que los principales paganos son los inmigrantes.

En declaraciones a Servimedia, el presidente de Atime, Mustafa Mrabet, confió en que a partir de ahora las relaciones entre ambos países sean "mucho más fructíferas y sólidas", para lo que invitó a los gobernantes a buscar los "intereses comunes e impulsar la complementariedad, no la animadversión", porque Marruecos y España "están condenados a entenderse".

"Marruecos es el norte del sur, y España, el sur del norte", resaltó, por lo que a ambos pases les conviene "cerrar heridas que aún están abiertas" y que pueden hacer peligrar su carácter de aliados e intermediarios entre Africa y el mundo musulmán, por un lado, y Europa y el mundo occidental, por otro. "Somos vecinos, no adversarios", recordó.

Para Atime, "hay muchas cosas de las que hablar", y aunque de una situación en la que "estuvieron a punto de meterse en una confrontación de carácter no deseado" no se puede pasar inmediatamente al "amor eterno", es imprescindible abordar todos los poblemas "desde la responsabilidad y el diálogo".

Mrabet indicó que es lamentable que haya tenido que intervenir Estados Unidos para resolver un problema al que no han sido capaces de dar salida los países implicados, por lo que les pidió que garanticen que una situación como ésta no va a volver a ocurrir, pues "va en contra de los intereses tanto de los ciudadanos marroquíes como españoles".

"La política de gestos es muy importante, y no hay que hacer excesivo alarde de fuerzas", dijo, porque incuso en una guerra "entre el grande y el pequeño" las dos partes pierden. Así, subrayó que "a quienes les gusta el sonido de los tambores de guerra se les debe apartar de los ámbitos de decisión".

El presidente de Atime recomendó una "reflexión profunda, serena y tranquila, sin precipitarse, sobre los motivos por los que se ha llegado a una situación de la que ambas partes son responsables", y resaltó que es necesario restablecer la normalidad, que pasa por el retorno de ambos embajadores.

En estesentido, apeló no sólo a la diplomacia política, sino también a "la diplomacia paralela o diplomacia de los pueblos", entre los partidos políticos y las organizaciones sociales, y no sólo los gobiernos, para intentar "marginar a los fanáticos y radicales" que intentan utilizar a los inmigrantes como "moneda de cambio" en todos los conflictos.

"Hay que dejar estos planteamientos aparte, desde el sentido común, porque los mayores perjudicados por las malas relaciones entre Marruecos y España somos los imigrantes, que lo hemos vivido con más intensidad que los marroquíes que viven en Marruecos o en otros países", apuntó.

Concluyó que los trabajadores marroquíes en España "no queremos estar entre la espada y la pared, ni pagar los platos rotos, sino tener una vida normal", para manifestar después su esperanza de que cuando se hable de inmigrantes se hable de "integración y solución de problemas".

(SERVIMEDIA)
22 Jul 2002
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