El presidente de Banesto aportó esta información hoy en una intervención bajo el título "El Oriente Medio como nuevo centro internacional de negocios", en el contexto de una reunión de empresarios que se celebra en Jerusalén.

La compañía en la que participará Banesto realizará sus primeros proyectos en el área de as infraestructuras, creando una planta de cemento y desarrollando redes de distribución para bienes de primera necesidad.

Esta toma de posición de Banesto en este área geográfica responde, según Mario Conde, al "potencial económico de Oriente Medio, que tiene su reflejo en el fuerte incremento de inversiones extranjeras en Israel, las cuales se han multiplicado por dos en el año 1992 respecto a 1991".

El presidente del banco español cree que las condiciones de paz que se están imponiendo en el áea generarán flujos de intereses empresariales que desarrollarán fuertemente la zona.

La intervención de Mario Conde estuvo salpicada de continuas referencias a esta capacidad generadora de negocio del proceso de paz. En un momento de su intervención afirmó que no hubiera aceptado la colaboración con una empresa israelí u otra palestina, sino que lo que le pareció atractivo, por su realismo y valentía, era la presencia conjunta de palestinos y judíos en la empresa que se va a crear.

Tras señalar ue debe convencerse a todos de las ventajas de la paz para evitar el fantasma del integrismo, se refirió especialmente a "los más necesitados, los más desesperanzados, los refugiados palestinos de Gaza y Cisjordania, también los de Líbano".

Se da la circunstancia de que dentro de una semana los Reyes de España inician un viaje a Israel cargado de simbolismo y contenido político, en el que don Juan Carlos tratará de dar continuidad a la autoridad moral adquirida por España en el desarrollo del proceso e paz palestino-israelí iniciado en nuestro país con la Conferencia de Paz de 1991 y reforzar los vínculos históricos que nos unen con los judíos.