A su juicio, "si España está convencida de su posición no tiene por qué alarmarse e inquietarse por estar en minoría en un consejo de ministros". El ministro alemán de Exteriores, Klaus Kinkel, pidió ayer a España que levante el bloqueo a la ampliación de la UE con el fin de no provocar "una grave cisis".

Marín aseguró que la cuestión más importante de las negociaciones de ampliación de la UE es el mantenimiento del derecho de veto en 23 votos, aunque dijo que los países nórdicos lo centraban en "las toneladas de bacalao".

El comisario europeo, que tiene previsto entrevistarse esta tarde en Barcelona con el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, reiteró la necesidad de que en la aplicación de la unidad económica y monetaria prevista en el Tratado de Maastricht España "se sitúe en el gruo de los grandes, aunque sea el último".

En este sentido, recordó que sólo de esta manera podrá tener una "coparticipación" en las grandes decisiones y tener una presidencia.

Sobre el próximo congreso del PSOE comentó que debe convertirse en el "inicio de la renovación del partido y terminar con las historias de familia, porque si no vamos a dejar de interesar a la gente".