Este cuerpo especial, explicó Romero, estaría compuesto fundamentalmente por policías europeos, aunque también debería haber algunos agentes procedentes de otros países, como Estados Unidos o Rusia, y se ocuparía de los problemas del blanqueo de dinero.

"Al mismo tiempo", señaló, "se tendría que poner en marcha una investigación judicial y policial para que Marbella no termine consolidándos como una zona donde las mafias ajustan sus cuentas y llenan de sangre con crímenes horribles una zona tranquila".

Para Romero, "lo que está pasando en Marbella y en la Costa del Sol se veía venir y el Gobierno no ha actuado desde el Ministerio del Interior poniendo los servicios de información y los mecanismos adecuados para reprimir el blanqueo de dinero procedente del narcotráfico y del mercado negro de armamento".

Precisamente ayer el director general de la Policía, Juan Cotino, anunció la inención de crear en el sur de España un grupo policial especial que se encargaría de luchar contra las mafias y el crimen organizado. El deseo de Cotino es que este grupo comience a funcionar cuanto antes.