Maragall se entrevistó esta tarde con Zapatero por primera vez desde los congresos de ambos partidos, y expresó después con entusiasmo su convencimiento de ue ellos son ahora los únicos candidatos conocidos para la opinión pública, frente a "los desconocidos que nadie sabe quiénes son", en referencia a José María Aznar y Jordi Pujol, que mantienen la ambigüedad sobre su posible candidatura a la reelección.

El dirigente catalán ve en esta circunstancia un "indicador cierto de que las cosas están cambiando y de que van a cambiar todavía más" porque los españoles esperan un mensaje de tranquilidad y seguiridad, pero también de garantía de pluralidad integraa en un proyecto común.

"Vamos a andar ese camino, lo vamos a andar juntos, corrigiendo todo lo que haya que corregir, ensamblando nuestros mensajes y terminando de una vez con esa pretensión de que no se puede hacer un proyecto común que una al centro con la periferia. Nosotros vamos a lanzar un mensaje a España desde Cataluña y lo vamos a hacer en sintonía con nuestros compañeros socialistas de todo el país", dijo Maragall.

En su opinión, "es falso eso que dicen los nacionalistas catalanes y a eces españoles de que eso es un barullo, que es imposible, que la España plural es una pretensión incierta. Es un proyecto cierto y lo vamos a sacar adelante".

Maragall se refirió al terrorismo y a la inmigración como los dos grandes retos que deben afrontar los socialistas con serenidad, pero con soluciones concretas a través de una acción conjunta de todos los partidos, incluido el PNV en el problema vasco.

A estos asuntos Maragall unió los que tratará con Jordi Pujol en su próxima entrevista, omo la financiación autonómica, a la que enmarca en la financiación global del Estado en sus tres niveles. En este terreno se mostró partidario de caminar hacia un modelo en el que el Estado gestione el 40% del gasto público, las comunidades el 30% y los ayuntamientos el 30% restante.

El líder de los socialsitas catalanes se mostró convencido de que Rodríguez Zapatero encarna una "esperanza nueva" para todos los españoles y explicó que mantendrá con él un diálogo permanente para coordinar sus política.