El ex alcalde de Barcelona señala en una entrevista que publica "El Mundo" que al presidente de la Generalitat le diría "gracias por los servicios prestados", porque su función "ha terminado".

En relación al problem de la violencia en el País Vasco, Maragall apunta que la calma sólo vendrá a España cuando Euskadi se pacifique. "Todo esto se terminará el día que suelten a los gatitos (presos de ETA). El día que se termine el drama vasco, se termina este drama de España".

Maragall utiliza en la entrevista, al hablar del País Vasco, la imagen del gato jugando con la madeja: "Si el gato sigue enredándola, ya le puedes echar mano, que nunca las desharás. Pero en el momento en el que el gato se esté quieto y esté jugado con la pelotita, la madeja podría deshacerse".

Sin embargo, el candidato socialista a la Presidencia de la Generalitat se muestra optimista y explica "que todo lo que ahora parece imposible de arreglar, que no tiene vuelta atrás, que son auténticos odios, todo se va a disolver como un azucarillo en el agua en el momento en que la causa activa de los dramas que vivimos deje de ser activa".

Finalmente, apunta que la actitud de Felipe González respecto a las consecuencias del "caso Marey" se explca porque "él está convencido de que hay una razón moral y de que él la tiene y otros no".