Mantiene la petición de 29 años de cárcel para el procesado -----------------------------------------------------------
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
El fiscal que acusa a Mauricio Triguero, un profesor de 51 años, de matar a su ex mujer, María Esteban, por desavenencias sobre la custodia de su hijo, considera que el procesado "tuvo voluntad plena" de llevar a cabo el crimen y antuvo su petición inicial de 29 años de prisión para el procesado.
Durante la sesión de hoy del juicio que se sigue en la Audiencia de Madrid por estos hechos, el fiscal elevó a definitivas sus conclusiones después de que el secretario diera lectura a la transcripción de algunas de las cintas que Mauricio Triguero grabó antes de cometer el parricidio el 21 de febrero de 1991, ante los 28 alumnos de primero de EGB a los que su ex mujer, profesora como él en el colegio "Ciudad de Valencia", impartía clses.
En ellas, el procesado explicaba las trabas que ésta le ponía para ver a su hijo, Héctor Mauricio, de 7 años, y se manifestaba "desesperado" ante la lentitud de la justicia, que no solucionaba el incumplimiento reiterado de su ex esposa del régimen de visitas establecido en la sentencia de la separación.
"He aguantado durante tres años con una paciencia de la que carezco, y no tengo más remedio que hacerlo", repetía Mauricio en las cintas, anunciando su intención de utilizar "el único arma qe me queda, la fuerza, y la utilizo, vaya si la utilizo".
Asimismo, decía ser plenamente consciente de lo que iba a hacer. "No puedo ir contra la ley y voy a ir donde la ley dicta que vaya una persona que va a hacer lo que yo", aunque especificaba que se sentía "orgullosísimo y me horroriza tener que cometer un acto como el que he previsto".
Apenas un día antes de la muerte de María Esteban, Mauricio confesaba en sus grabaciones que "se acerca el momento de cometer la acción", tras agotar "todas as posibilidades", y repetía que nunca se arrepentiría de ello: "Soy buen pagador y pagaré mis deudas".
"Sólo por él me pierdo y me pierdo a gusto", reflexionaba el todavía presunto parricida refiriéndose a su hijo, al que aconseja "ser feliz por encima de todo" y no cometer "ningún disparate", porque "la vida es muy bonita y tienes que disfrutarla como yo la he disfrutado hasta que conocí a tu madre".
En las cintas que Mauricio dejó sobre al mesa de su clase, dirigidas al director del colegio, a claustro de profesores, al juez y a su propio hijo, antes de asesinar a su ex esposa, el procesado se expresaba en términos similares e insistía en que María y sus hermanas pretendían lavar el cerebro a su hijo, "porque me adoraba y María se separó de mí porque tenía celos", palabras que contradicen la versión de una de las hermanas de la víctima, que ayer aseguró ante el tribunal que el pequeño no quería ver a su progenitor.
El ministerio público basó parte de su alegato final en el contenido de ests cintas para acreditar que la "decisión de matar" primó en la mente del acusado, en contra de la tesis mantenida por su abogado defensor, que pretende demostrar que el procesado fue víctima de un trastorno mental transitorio.
Para rebatir esta teoría, la fiscal recordó el informe emitido el día anterior ante la sala por los peritos psiquiatras, que declararon que Mauricio "valoraba adecuadamente la realidad", tenía "capacidad volitiva" y por tanto "eligió matar pudiendo no haberlo hecho".
Por elo, volvió a solicitar una pena de 29 años de reclusión mayor para el acusado, con las agravantes de alevosía y premeditación, aunque reconoce la atenuante de arrpentimiento espontáneo, ya que éste se entregó minutos después en la comisaría de Entrevías y confesó su crimen.
Como única modificación pidió la retirada de la patria potestad sobre el pequeño por no estar capacitado para ejercerla, solicitud a la que se sumaron el resto de las acusaciones.
El juicio continuará mañana, cuando sólo quedanpor informar la acción popular, representada por la Federación de Mujeres Separadas y Divorciadas, y el abogado defensor, por lo que se prevé que quede visto para sentencia en el mismo día.
(SERVIMEDIA)
30 Ene 1992
C