Empleados de los tres centros citados y del de Vista Alegre se concentraron hoy, acompañados por representantes de los sindicatos UGT y CCOO, para expresar su apoyo a los encerrados.

Los sindicatos y los trabajadores se quejan de que la entrada en vigor de La Ley del Menor ha multiplicado el número de ingresos en los centros de menores, lo que ha provocado su saturación y que 160 jóvenes con sntencias firmes se encuentren pendientes de ingreso en ellos.

Javier López, secretario general de CCOO-Madrid, criticó que el Gobierno regional insista tanto en la creación de las Brigadas Especiales de Seguridad Ciudadana (BESCAM) y al mismo tiempo no resuelva el problema de falta de plazas en los centros de reforma para menores.

"Esto ocurre cuando se ponen en marcha leyes que no garantizan los recursos necesarios para que cada comunidad autónoma atienda a los jóvenes que les han sido asignados, agregó López, quien remarcó que los trabajadores no están pidiendo mejoras salariales, sino más recursos para desarrollar de forma adecuada un servicio público.

Alberto Sánchez, representante de UGT en el Instituto Madrileño del Menor, señaló que "da la impresión de que lo que se quiere es que esta ley no salga adelante". "Hay muy poca sensibilidad por parte de Instituto (Madrileño del Menor y la Familia) y por parte de los políticos responsables del Gobierno popular".

Tanto los sindicatos com los empleados de los centros tienen previsto celebrar mañana una asamblea informativa para valorar los 27 días de encierro y decidir futuras actuaciones.