La central denuncia que no se ha contado con los profesionales, los usuarios y los representantes de los trabajadores y que la medida se enmarca en los intentos del PP de introducir el derecho privado en el Sistema Sanitario Público, con la intención de que su actividad no sea regulada por el derech administrativo.

"La FSP-UGT de Madrid rechaza esta figura jurídica porque introduce, bajo la careta de modernidad y eficacia en la gestión, criterios mercantilistas, orientados a la desarticulación progresiva de los conceptos de equidad e igualdad", afirma el sindicato en un comunicado.

Según la central sindical, aunque es necesario mejorar la gestión de los servicios sanitarios, este objetivo no se conseguirá con "la simple introducción de modelos mercantilistas tendentes a la privatización de ervicios".

"Desde este sindicato entendemos que debe producirse el proceso de transferencias sanitarias a la Comunidad de Madrid de forma urgente, y no aplicar soluciones temporales que no hacen sino dejar entrever que el proceso está lejano en el tiempo", agrega UGT.