Al primer herido de que se tuvo constancia, Pedro Pérez Gil, de 37 años, que sufrió quemaduras graves en su cuerpo, se sumaron posteriormente dos trabajadores de "Relaxa". Uno de ellos sufrió quemaduras en los brazos y el otro tuvo que ser atendido por insuficiencia respiratoria, provocada por la inhalación de humo.

Según nformaron a Servimedia fuentes de la Dirección General de Protección Ciudadana de la Comunidad de Madrid, el fuego se detectó en la planta de calderas.

Al parecer, la excesiva acumulación de un polvillo que se desprende en la fabricación de piensos y que produce una reacción química cuando sufre recalentamiento fue lo que dió lugar a la primera explosión.

Tras escucharse un fuerte ruido e iniciarse el fuego, los operarios que se encontraban en ese momento en el interior de la fábrica, unas diez prsonas, pudieron escapar hacia el exterior del recinto antes de que se propagaran las llamas y el humo se hiciese espeso, lo que evitó víctimas mortales.

Las nueve unidades de bomberos que realizaron las labores de extinción del incendio evitaron que las llamas alcanzaran un remolque cargado de hidrógeno líquido (no nítrogeno líquido como informaron los bomberos en un primer momento), material altamente inflamable y peligroso, que de haber sido alcanzado por las llamas, habría producido una catástrofemucho mayor.

En la extinción del fuego participaron nueve dotaciones de bomberos de la Comunidad de Madrid, otras tantas de la Comunidad de Castilla-La Mancha, efectivos de la Guardia Civil de los alrededores, la Policía Local de Ciempozuelos y ambulancias de la Cruz Roja.