"Mis esfuerzos irán en ese sentido y, si es necesario, como candidato, en respuesta a los muchos compañeros que me piden que lo haga. Estoy dispuesto, pero siempre para trabajar orientando el futur hacia la integración, la confluencia y la busqueda del segundo encuentro", manifestó en una entrevista concedida a Servimedia.

El diputado regional y senador socialista, que fue consejero de Salud en los gobiernos presididos por Joaquín Leguina, señaló que "en la FSM está faltando la generosidad de poner en común los puntos de vista. Pudiera parecer que el debate se centra sólo en demostrar qué familia tiene razón. Es urgente volver a un clima de confianza política, leatad colectiva y generosidad, paa poder hacer funcionar la FSM".

Tras aclarar que las llamadas familias o sectores "no se van a disolver mágicamente", explicó que sí se les puede "exigir que contribuyan a un acuerdo facilitando el paso a un candidato que se comprometa a ir mas lejos para que la FSM tenga un equipo cohesionado que oriente la politica desde la integracion y desde el abordaje de los problemas de los madrileños".

Con respecto a las familias de la FSM, recordó que, aunque algunos les dan un sentido peyorativo y les tribuyen todos los males actuales, tanto el socialismo europeo como español se configuraron en torno a corrientes que jugaron un papel relevante.

Dijo no ser partidario de las familias creadas "ad hoc", aunque dejó claro que "tampoco cabe demonizarlas, ni hacerlas principio y fin de todos los males de la FSM. No caben soluciones cuasi teológicas y de fe a problemas políticos".

A su juicio, el próximo secretario general de la FSM "ha de comprometerse a conseguir un partido mas democratico y con ma afiliados, a los que se ofrezcan mayores oportunidades de participación. A realizar una humilde oferta de trabajo orientada a reconstruir la confianza que durante los últimos años hemos destruido".

Sabando se mostró "firmemente" convencido de que esto es posible". Puso como ejemplo su experiencia al frente de la Portavocía del Grupo Parlamentario PSOE-Progresistas de la Asamblea de Madrid y dijo que en su trabajo ha podido comprobar que "es posible contar con todos, que hay excelentes cuadros en la FM, que todos quieren superar la guerra de familias, que se pueden formar equipos con personas procedentes de distintas familias y que todos trabajan lealmente en un proyecto común cuando el proyecto existe".

"Si esto es posible en el Grupo Parlamentario, porque no habrá de ser posible en el conjunto de la FSM", señaló Sabando, que se mostró convencido de que la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE será neutral en el próximo congreso de la FSM. "Garantizada su neutralidad, debería evitar que se produjern dislates", añadió.

Sabando analizó también la crisis que padece la FSM y afirmó que, "desde 1986, el socialismo madrileño no ha hecho más que retroceder electoral y politicamente, pasando de ser un partido con mayorías absolutas a uno minoritario con limitada capacidad para articular la sociedad madrileña".

Tras recordar que, durante esta etapa el PSOE ha perdido el Gobierno regional, el Ayuntamiento de Madrid y otros municipios, además de diputados nacionales, señaló que "la vida de la FSM se a trufando de pugnas internas y estériles polémicas, con retrocesos electorales y sociales".

Sabando fue muy criticó con la última etapa de la FSM, a cuyo frente está el equipo liderado por Jaime Lissavetzky, por haber "eludido sus responsabilidades ante el declive electoral y atribuirlo sustancialmente al desagaste del Gobierno central".

Antes de hablar de temas relativos al IX Congreso de la FSM, explicó que el resultado del pasado congreso regional provocó que el 50% del partido quedara fuera e la dirección, lo que, a su juicio, hizo que "algunas decisiones importantes se tomaran en otros niveles del partido y llegaran ya servidas a la FSM", en clara alusión a la designación de Cristina Almeida como candidata socialista a la Presidencia de la CAM, que fue decidida por la Comisión Ejecutiva Federal.

Dijo que lo sucedido debe servir de experiencia para que no se repita, ya que "no cabe actualmente dicho esquema, ni orgánica ni políticamente y además es nocivo para la credibilidad de nuestro artido".

Afirmó que la pugna interna vivida por la FSM ha producido daños internos y externos, entre ellos que ningún dirigente madrileño forme parte de la Ejecutiva Federal del PSOE, encabezada por su secretario general, José Luis Rodríguez Zapatero. "Es urgente poner fin a este estado de casos y el proximo congreso de la FSM debería ser ocasión para ello".

Sobre el próximo congreso de la FSM, dijo que se está convirtiendo "en un capítulo más de la guerra entre familias. Surgen candidatos que so una verdadera sorpresa para los ciudadanos y para los que llevamos muchos años de militancia también. Los prolegomenos del congreso parecen no presagiar nada nuevo, pero no me resigno".

Preguntado por la proliferación de candidatos, dijo que "los de mas larga trayectoria en el partido", en referencia al guerrista José Acosta, han acumulado loables y legítimos apoyos", aunque vaticinó: "Seguro que su presentación inducirá al intento de creación de mayorias a la contra, aunque solo fueran coyunturales"

Con respecto a otros candidatos, "aquellos con una trayectoria más reciente y poco relevante hasta la fecha, dificlmente puede nadie creer que sean capaces de sobreponese a los grupos que les avalan y de encauzar esta situacion. Da la sensacion de ser candidatos ocasionales que tratan de responder a un desvaido retrato robot de Zapatero".