La selección que acompañó a Rumanía en la final fue Cabo Verde. Tras empatar a dos tantos en los noventa minutos de juego y disputar una reñida prórroga, el ganador se impuso en la tanda de penaltis.

Antes de la celebración de la final tuvieron lugar actuaciones musicales de artistas de ambos países, así como una exhibición de danzas bolivianas en el intermedio

Los jugadores inmigrantes representaron a las selecciones de Angola, Colombia, Chile, Ecuador, Cabo Verde, Camerún, Marruecos, Nigeria, Perú, Polonia, Rumanía y Suecia, y los partidos se disputaron en el polideportivo de Vicálvaro y en el campo de fútbol "García de la Mata".

El objetivo de esta competición era ofrecer la posibilidad de mezclar culturas a través del deporte, con el fin de propiciar un mayor entendimiento entre todas las personas que llegan a España procedentes de otros países.

Este I Mundialito de la Solidaridad y la Inmigración contó con la colaboración de la Comunidad de Madrid, el Ayuntamiento de Madrid, la Federación Madrileña de Fútbol y Madrid 2012.