Tras indicar que "no tenemos constancia de que se haya puesto en marcha una iniciativa de este carácter en ninguna región europea", informó, en la sesión celebrada el miércoles,de que la implantación del programa se hará "de forma paulatina".

Explicó que en los cursos 2007/2008 y 2008/2009, un total de 18.000 alumnos de 5º y 6º de Educación Primaria Obligatoria, de entre 10 y 12 años, podrán participar en el programa.

Para el desarrollo de esta actividad, la Agencia Antidroga de la Comunidad de Madrid destinará un total de 399.168 euros.

Explicó que esta iniciativa se ha puesto en marcha tras los buenos resultados de una prueba piloto que realizó durante el curso escolar 2006-2007 el Servicio de Prevención de la Agencia Antidroga, consistente en un programa de prevención integral de adicción a las nuevas tecnologías, denominado "Avanzamos", con el objetivo de poner a prueba una serie de contenidos preventivos, relacionados con el uso de las nuevas tecnologías, así como la metodología de su aplicación.Este programa iba dirigido a escolares de entre 11 y 13 años, y a sus padres.

El objetivo central del programa es "evitar un uso inadecuado de las nuevas tecnologías y prevenir, así el posible desarrollo de conductas adictivas, dijo, y añadió que "el objetivo, al contrario de lo que ocurre con las sustancias adictivas, no es evitar el uso o consumo, si no evitar el uso inadecuado".

El responsable de la Agencia Antidroga, que compareció para hablar de las iniciativas que se están adoptando en la Comunidad de Madrid para prevenir conductas adictivas a las nuevas tecnologías entre los jóvenes, dijo que "los trastornos adictivos sin sustancia no son un fenómeno nuevo en nuestra sociedad".

Afirmó que "el desarrollo y extensión de las nuevas tecnologías, con la aparición de múltiples aplicaciones para el ocio, así como el acceso generalizado de los jóvenes y menores de edad a estas aplicaciones, posibilita la aparición de patrones de uso no adecuados, que pueden derivar en conductas adictivas".

Los estudios realizados sobre uso de las nuevas tecnologías por los jóvenes indican, entre otros datos, que el 38% de los usuarios de teléfono móvil entre 11 y 17 años han desarrollado reacciones de angustia, en diverso grado, al verse privados del móvil; que el 5% de los menores de edad acuden prácticamente a diario a cibercentros; o que el 37% manifiesta la necesidad de conectarse a Internet con frecuencia.

A su juicio, estos datos "no permiten hablar de un problema de salud pública, pero sí indican que, al menos una parte de nuestros adolescentes, está haciendo un uso no adecuado de las nuevas tecnologías aplicadas al ocio".