En su opinión, en la actualidad, la gestión presupuestaria, los aspectos funcionales y las dependencias orgánicas "se superponen de manera que, hospitales, servicios regionales y consejería parecen una misma cosa. Los recursos luyen sin solución de continuidad".

Esta situación es "desconcertante y por ello planteamos su corrección", dijo Posada. Aclaró que quiere establecer una clara linea de "responsabilidad frente al ciudadano, referente fundamental de los servicios sanitarios".

El nuevo modelo de la consejera reserva para su departamento las funciones "propias de autoridad sanitaria" (definición de criterios generales), el control sobre los presupuestos y la ordenación de las prestaciones y la financiación del Serviio Regional de Salud.

Con relación a los hospitales, dijo que la "distribución actual de instalaciones condiciona el tamaño de su área de influencia", para añadir a continuación que "es preciso llegar a un compromiso que equilibre la oferta y la demanda en un entorno geográfico diferente".

Refiriéndose en concreto al Hospital Gregorio Marañón, afirmó que es conveniente que "funcione a corto plazo con un presupuesto de ingresos que limite su capacidad de gasto y, eventualmente, que la incremente, i es capaz de generar ingresos adicionales".