Con un pequeño giro el policía confirmó sus sospechas: el joven que le seguía en la fila, que ni siquiera se había quitado las gafas de sol, llevaba una pistola en la cintura, tapada con la cazadora.

Al momento, el agente se salió de la fia, se acercó a la mesa del subdirector de la oficina y después de identificarse le dijo que avisara al 091, pues estaba a punto de cometerse un atraco allí mismo. No había terminado de hablar cuando el sospechoso se dirigió hacia ellos. El funcionario se abalanzó sobre él y consiguió arrebatarle el arma, a la vez que se identificaba como policía, tranquilizando así a empleados y clientes.

En pocos minutos, dos policías de Investigación de Proximidad acudían a la sucursal y se hacían cargo del detenidoy del arma, una pistola detonadora modelo 85 y calibre 9 milímetros.

El atracador es José Javier M.M., de 20 años. No tenía antecedentes y se encontraba en un programa de desintoxicación de sustancias estupefacientes.