Quintana, promotor de la Plataform de Izquierda, integrada por alcaldes socialistas de la zona sur y destacadas personalidades como los ex consejeros Pedro Sabando y Julián Revenga, destacó que "el acuerdo sería bueno porque en los momentos actuales, con la derecha en el poder, es importante conseguir la mayor cohesión posible en la FSM, dentro de las discrepancias internas, que nos permita tener una dirección política que sea apoyada por el 70 u 80% de los afiliados, como mínimo".

El alcalde de Fuenlabrada afirmó que "ese acuerdo necsario" entre Acosta y Lissavetzky "nos permitirá estar en las mejores condiciones posibles para competir e intentar ganar al PP en las elecciones de 1999 y acabar con la paulatina disminución de las inversiones en el sur por parte de la derecha nacional de Aznar y la regional de Ruiz-Gallardón".

Reiteró que "hay que demandar a ambas partes que tienen que tener no sólo la voluntad, sino los instrumentos necesarios para llegar a un acuerdo". Agregó que tanto él como otros miembros de la Plataforma de Izuierdas "estamos trabajando en esa dirección y ya hemos transmitido verbalmente tanto a Acosta como a Lissavetzky la conveniencia de que efectivamente se pongan de acuerdo".