Asistentes al Comité Regional explicaron a Servimedia que Candela pidió la palabra para presentar algunas enmiendas al citado documento, ya que a su juicio algunas aportaciones sobre la necesidad de constituir la agrupación de Madrid ciudad y las alusiones a algunos temas como las incompatibilidades deberín de eliminarse, con el objetivo de que la declaración se centrase sobre todo en la necesidad de trabajar para ganar las elecciones generales del año 2000.

El secretario general de la FSM, Jaime Lissavetzky, contestó a Candela señalando que compartía en globalidad lo expresado por ella, pero que el documento no admitía enmiendas porque había sido consensuado entre los sectores más representativos. Finalmente, Milagros Candela rechazó volver a intervenir ante la imposibilidad de presentar enmiendas al exto.