No obstante, el dirigente regional manifestó se tendrá en cuenta el informe de los técnicos del Ayuntamiento para que, en caso de que se detecte algún tipo de conexión entre las obras y el deterioro de los pisos, sea el Gobierno regional, quien se haga cargo de la reparación de las viviendas.

Tanto Cortés como los ingenieros Manuel Arnaiz y José María Rodíguez, que han asesorado a la Comunidad en la realización de la obra, expresaron su opinión de que el deterioro de las casas se debe a que ha pasado mucho tiempo desde la construcción de las mismas y a que han tenido una conservación precaria.

Asimismo, dijeron que entre el túnel del metro y las viviendas afectadas hay una distancia de 100 metros, que según dijeron sería suficiente para que no tuviera repercusión. Además desvelaron que entre la obra del suburbano y el bloque afectado hay muchos pisos e por medio, más cercanos a las obras, que no han sufrido ningún desperfecto, por lo que restaron credibilidad a la denuncia de quienes vinculan las grietas con la construcción del metro.