Gallardón señaló que los 48 mercados de titularidad municipal han sido los centros que mayor clientela han perdido por su falta de adecuación a los nuevos hábitos de consumo. Para su recuperación, este plan pretende, entre tras medidas, diversificar la oferta, eliminar las barreras arquitectónicas, facilitar servicio a domicilio y de aparcamiento o permitir el pago con tarjeta.

También se prevé mejorar el entorno de estos centros, instalando puntos limpios, parques infantiles o incrementando la presencia policial para evitar la venta ambulante.

El alcalde de Madrid resaltó la importancia de "devolver el pulso a los mercados en consonancia con los niveles de exigencia de los ciudadanos". Para ello, la propuesta muniipal incluye la realización de unos estudios de viabilidad para conocer tanto las necesidades de cada uno de los mercados como las características y hábitos de consumo de los vecinos del barrio donde se ubican.

Para atraer a nuevos segmentos de información, el plan contempla el aprovechamiento de plantas y locales vacantes para establecer en ellos bibliotecas, gimnasios, guarderías o salas de reuniones para los vecinos.