Según manifestó a Servimedia el jefe de guardia de los Bomberos de Madrid, las mujeres tienen en su casa, el quinto B del número 154 de la calle de Fuencarral, una caldera de calefacción y agua caliente que consume gas propano de dos bombonas colocadas en paralelo.

Cuando esta mañana procedían a sustituir una de las bombonas, la válvula de la instalación, en vez de impedir que saliera el propano, no fucionó y el gas de la otra bombona continuaba saliendo.

En lugar de quitar la otra botella, las mujeres salieron asustadas de la vivienda en busca de ayuda. El vecino del piso de abajo, Venancio, llamó a los Bomberos y pidió ayuda. El funcionario que le atendió le dijo que tuvieran cuidado de no encender ninguna clase de fuego ni de luces y, cuando le iba a preguntar por la dirección, el ciudadano, nervioso, colgó.

Poco después, los Bomberos recibieron la notificación de que se había producido unaexplosión en la calle Fuencarral. Venancio Ruiz fue atendido por una ambulancia del Samur y la Policía Municipal. El hombre tenía los pantalones hechos tiras de la explosión, pero no parecía con quemaduras graves. Fue trasladado al Hospital "La Paz".

La madre y la hija salieron ilesas porque estaban en el piso de abajo cuando, por causas desconocidas, el gas acumulado hizo explosión. La vivienda sufrió graves desperfectos, según la Policía Municipal.