Los hechos se produjeron a primeras horas de la tarde cuando en la piscina, en ese momento ocupada por varios bañistas, se produjo una fuga del cloro utilizdo en la depuradora, lo que obligó al inmediato desalojo de la instalación, sin que resultara intoxicado ningún bañista.

Los tres operarios intentaron la reparación inmediata de la fuga, pero no lo consiguieron y se intoxicaron al inhalar la sustancia química, por lo que tuvieron que ser auxiliados por miembros del Cuerpo de Bomberos, además de por miembros del Samur y de los propios servicios médicos de la instalación.