Conforme a las directrices marcadas por la Delegación del Gobierno para la Operación Navidad, la Guardia Civil inició la "Operación Buho", cuyo fin es controlar el comercio, tenencia y utilización de armas prohibidas, prestando especial atención a las armas blancas que sobrepasen los límites legales, según informó hoy en una nota la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid.

La Guardia Civil intensificó con motivo de la Navidad el número de inspecciones en locales comerciles dedicados a la venta de armas en general.

La aprehensión más destacada se realizó en un local dedicado a la comercialización de componentes eléctricos, en el que se intervinieron defensas eléctricas y sprays de defensa personal carentes de homologación y reflejadas como armas prohibidas en el Reglamento de Armas.

Dentro de la Operación Buho se han recogido un total de 17 armas blancas y varias carabinas de aire comprimido, cuyos propietarios portaban en la vía pública.