Un portavoz de la Confederación explicó a Servimedia que confían en que esta sea una de las primeras medidas acometidas por el nuevo Gobierno de la Comunidad de Madrid.

"Lo único que se ha conseguido hasta ahora con este impuesto es crear un efecto frontera", se quejaron los gasolineros, en el sentido de que la mayoría de las empresas de transportes repostan fuera de la Comunidad de Madrid.

En este sentido, los gasolineros afirmaron que muchos de susasociados madrileños han visto reducido su volumen de ventas, no tanto en relación con los ciudadanos de a pie como con los transportistas profesionales, como consecuencia de este "efecto frontera".

Por último, confían en que Simancas cumpla su promesa para acabar de esta forma con un impuesto, a su juicio, injusto, "porque todavía no entendemos que tiene que ver la gasolina con la sanidad", concluyeron.