Con la inauguración de hoy son ya 16 los CASI que funcionan en la región, que cuenta con más de 400.000 ciudadanos extranjeros, casi el 13% de la población total.

"Toda esta polación, por su capacidad para generar riqueza, supone un potencial de progreso para la ciudad, y también enriquece a Madrid en forma de diversidad cultural y confirma nuestra vocación de ciudad abierta y cosmopolita, de ciudad de acogida", dijo Ruiz-Gallardón.

A su juicio, toda la sociedad debe participar en esta labor de integración, lo que ayudará a evitar que "si los inmigrantes se encuentran desprotegidos y aislados del resto de la sociedad, esta situación de frustración les haga recurrir a otros étodos para subsistir, en ocasiones al margen de la ley".

El dirigente popular citó entre los principales responsables a las instituciones: "La inmigración no es un problema, es una oportunidad, pero una oportunidad que exige retos nuevos y demanda actuaciones nuevas a las administraciones públicas, que no pueden quedarse indiferentes ante esta situación que nos convoca a todos".

En la inauguración del centro estuvo también presente el consejero en funciones de Servicios Sociales, José María Alono, quien afirmó que "la política regional en inmigración marcha diez años por delante de su tiempo". Agregó que en la consejería tienen claro que "se debe actuar desde un presente continuo, buscando soluciones a este presente, pero soluciones que también están en el futuro".

El nuevo CASI de Usera tiene como objetivo atender las necesidades de integración de los más de 19.000 inmigrantes empadronados en el distrito, lo que supone cerca del 15% de la población total. En el centro trabajan 16 profesionaes, que prestan atención psico-social, legal y de integración. Además, cuenta con 21 plazas para casos de acogida y alojamiento urgente.