El líder conservador, que aclaró qu las soluciones que él ofrece no pasan solamente por medidas policiales para combatir la delincuencia, se mostró partidario de "legalizar" la prostitución para que la vía pública no sea el lugar de "captación de clientes".

Asimismo, solicitó que esa regularización de la prostitución contemple la obligación de que estas personas se sometan a controles sanitarios y, "como todas las actividades lúdicas", estén sometidas a cotroles fiscales.

Ruiz-Gallardón señaló que su intención es conseguir un "cenro vivo" y anunció que, si accede al Gobierno regional, "en una semana" se pondrá manos a la obra para impulsar un acuerdo entre las tres administraciones (regional, local y central), con el objetivo de acelerar la rehabilitación de este distrito de la capital.

Señaló que los problemas de seguridad ciudadana que sufre la zona centro no son causados solamente por la delincuencia, sino por la "degradación de la calidad de vida", ya que algunos vecinos habitan en infraviviendas.

Con relación a los txicómanos, explicó que no se debe hacer recaer todas las culpas sobre el drogadicto, sino que es necesario "ir contra los narcos".

El candidato del PP pidió asimismo la extensión del Plan Belloch contra la delincuencia, que ahora funciona en Madrid, a todos los pueblos de la región y la puesta en marcha, si gana las elecciones, de un macro Plan de Prevención de la Delincuencia.