Las instalaciones, situadas en Pozuelo de Alarcón, integran todos los servicios de emergencia de la región, a excepción del SUMMA y del cuerpo de bomberos. Este último se integrará en el 112 por una decisión que adoptará el próximo Consejo de Gobierno.

El edificio, que comenzó a construirse en noviembre de 2000, cuenta con 22.000 metros cuadrados de superficie, de los que 1.500 están destinados a una sala de operaciones con capaidad para 120 puestos de trabajo.

Desde que comenzase en 1998, el servicio del 112 funciona las 24 horas de los 365 días del año y registra el 60% de las llamadas de emergencia de la Comunidad de Madrid.

Gallardón destacó la "coordinación" de todos los servicios de la comunidad que permite el 112, que se verán aumentados a partir de hoy con un edificio que cuenta "con los medios tecnológicos más modernos y eficaces".

Por su parte, el ministro del Interior, Angel Acebes, resaltó "la rapidez yagilidad" de los servicios de emergencias en el 112, lo que calificó como "un magnífico ejemplo de cómo trabajar con seriedad, y sin experimentos, y sin destruir nada de lo que funciona", en alusión a la propuesta socialista de unificar la Policía Nacional y la Guardia Civil.