Según informaron a Servimedia en fuentes de la Policía, entre las 12:30 y las 2:00 horas del Año Nuevo el problema más común se da en las salas donde se celebran los cotillones, ya que en algunos lugares se venden más entradas de las que permite el aforo.

Sin embargo, es a partir de las 6 de la mañana cuando el "peligro" aumenta, porque "la gente lleva toda la noche bebiendo y es ese momento cuando se producen los accidntes de tráficos más graves", señalaron las fuentes citadas.

En este sentido, "se está dando una mayor concienciación de la población y cada vez hay más gente que si está bebiba no lleva el coche o utiliza el transporte público", apuntaron.

La Policía Municipal intensifica en esa madrugada los controles de alcoholemia para evitar estos accidentes, aunque debido a un mayor movimiento en la calle "es normal que haya más positivos que cualquier otro fin de semana".

Las fuentes recordaron que diiembre "es un mes malo en cuanto a accidentes y atropellos graves, ya que es la época del año donde se produce más tráfico de vehículos y peatones".