Las mismas fuentes señalaron que de las diligencias instruidas se deduce que Eugenio Miguel era el presunto organizador de la actividad delictiva descubierta; Leocadio Alexis, como la persona que llevaba a cabo las falsificaciones y Yulak buscaba a los clientes entre los compatriotas que frecuentan el Centro Cubano en Madrid, donde trabaja como camarero.

El control de pasaportes del aeropuerto de Barajasha detectado en los últimos meses pasaportes falsos, que eran utilizados por pasajeros con destino a Miami. La manipulación consistía en la sustitución de la fotografía del titular, ciudadano español, por la del pasajero, de origen cubano.

Eugenio Miguel conseguía los pasaportes de ciudadanos españoles gracias a su trabajo de relaciones públicas en una conocida discoteca. Después de ser falsificados por Leocadio Alexis, eran adquiridos por 5.000 pesetas por los clientes cubanos captados por Yulak. Eugnio Miguel pedía a los titulares de los pasaportes que no denunciara su pérdida o sustracción hasta pasados unos días.