Por su parte, la Unión de Consumidores de la Comunidad de Madrid-UCE ha recomendado a los automovilistas madrileños que, cuando sea posible, reposten en gasolineras de otras comunidades autónomas donde no se aplique el nuevo impuesto.

"Financiar servicios esenciales como la sanidad con productos tan volátiles como la gasolina es crear un grave procedente, puesto que supone confiar al albur del mercado cuestiones que afectan a derecos ampliamente reconocidos en la Constitución", indicó la CECU.

Según la confederación, garantizar la mejora y la eficacia del sistema sanitario es una obligación de cualquier gobierno, sin necesidad de elevar la carga impositiva que soportan los ciudadanos. "Las mejoras en la sanidad", afirma, "deben hacerse con el dinero de todos vía Presupuestos Generales".

Finalmente, la CECU recuerda que algunas comunidades autónomas ya han puesto en marcha planes para reducir las listas de espera sin necesiad de aumentar los impuestos, que suponen una merma en la capacidad adquisitiva de los ciudadanos.

UCE

Por su parte, la Unión de Consumidores de España (UCE), además de recomendar a los usuarios que reposten en otras comunidades limítrofes donde no se aplique este impuesto, considera suficientes los actuales impuestos que gravan los carburantes y afirma que la medida impulsada por el Gobierno de Ruiz-Gallardón es injustificada.

La UCE considera "una argucia política más plantear a los usuariosciudadanos que los servicios sanitarios públicos mejorarán gracias a este nuevo gravamen, ya que el Gobierno de la Comunidad ha podido y puede ampliar la red de Metro sin incorporar un impuesto añadido".

"Por una parte se nos dice que bajan los impuestos (por la Administración central) y por otra nos los suben (por la Administración autónoma)", lamentó la UCE.